Muy interesante
¿A qué llamamos superalimentos?
Determinar qué alimentos merecen llamarse “súper” no es un proceso empírico, y la falta de una definición formal hace que sea casi imposible navegar a través de las olas de la especulación de estos alimentos. Por tanto, es importante adoptar un enfoque objetivo cuando veamos la palabra “superalimento” para no ser convencidos por una buena táctica de marketing.
No hay un solo tónico o polvo que cure todas las dolencias de la vida, pero sí que existe una variedad de frutas, vegetales y otros alimentos desconocidos en gran medida que son especialmente ricos en nutrientes.

Café
La cafeína, el estimulante suave que se encuentra en el café, mejora la agudeza mental, aunque los entusiastas de la bebida, que se ‘apropian’ de 120,000 toneladas cada año, probablemente ya lo sepan. Además de los efectos potenciadores en el cerebro de la cafeína, la riqueza antioxidante del café ayuda a mantener la salud del cerebro.

Germen de trigo
El germen de trigo es una rica fuente vegetariana de colina, un nutriente involucrado en la producción de acetilcolina del organismo, un neurotransmisor que aumenta la memoria.

Remolacha
Las remolachas son una buena fuente de nitratos de origen natural, que ayudan a mejorar el flujo sanguíneo al cerebro. Así, según un estudio desarrollado por científicos de la Universidad de Wake Forest (EE. UU.) determinaron que los nitratos naturales de la remolacha pueden aumentar el flujo de sangre al cerebro, mejorando así el rendimiento mental.

Ajo
El ajo puede ayudar a evitar algunas formas de cáncer cerebral, según una investigación publicada en Cancer, la revista médica de la American Cancer Society. Los expertos descubrieron que los compuestos orgánicos de azufre en el ajo funcionaban con éxito para matar las células de glioblastoma, un tipo de célula tumoral maligna, y el tumor más común y más maligno entre las neoplasias de la glía.

Carne de res
Un estudio publicado en la revista American Journal of Clinical Nutrition encontró que las mujeres con niveles saludables de hierro tuvieron mejores resultados en tareas mentales y completaban los ejercicios más rápido que las que tenían un estado pobre de hierro. El hierroayuda a transportar oxígeno a todo el cuerpo y al cerebro. Una buena forma de tomar hierro es comiendo carne de res. También puedes probar con hígado o con frutos secos como nueces, almendras tostadas o pistachos.
Naranjas
Puedes obtener toda la vitamina C que necesitas para un día con una sola naranja. Comer naranjas es importante para la salud del cerebro, ya que la vitamina C es un factor clave para prevenir el deterioro cognitivo. Tomar cantidades suficientes de alimentos ricos en vitamina C puede proteger contra el deterioro cognitivo asociado a la edad y la enfermedad de Alzheimer. También puedes obtener excelentes cantidades de vitamina C de los pimientos, el kiwi, los tomates y las fresas.

Salvia
Un estudio publicado en la revista Pharmacological Biochemical Behavior encontró que los adultos jóvenes que tomaron extracto de aceite de salvia (50 micro litros) antes de las pruebas cognitivas se desenvolvieron mucho mejor que los que recibieron un placebo. El extracto de salvia contiene compuestos que previenen la descomposición de la acetilcolina, un neurotransmisor involucrado en el aprendizaje y la memoria.

Huevos
Los huevos, más específicamente las yemas de los huevos, son una fuente increíble de colina. La colina es un precursor de la acetilcolina, como ya hemos comentado, un neurotransmisor involucrado en ayudarnos a recordar cosas como dónde dejamos las llaves de la casa o dónde aparcamos el coche. Comer alimentos ricos en proteínas como los huevos puede mejorar el rendimiento cognitivo general, según un estudio realizado en Suiza.

Los pescados son una fuente rica en fósforo que ayuda a fortalecer el cerebro, sobre todo, dándole un impulso a nuestra memoria. Gracias a los ácidos grasos omega 3 que nuestro organismo es incapaz de producir, este superalimento ayuda a proteger nuestra salud cerebral tanto a la capacidad cognitiva como la memoria, por lo que se recomienda su consumo periódico, sobre todo, de los pescados azules (sardinas, salmón, atún, trucha…)

Frutos secos
Los frutos secos nos aportan muchos minerales y vitaminas, entre ellos, fósforo, magnesio, potasio, vitaminas del complejo B y vitamina E, todos ellos se convierten en excelentes herramientas para mantener una buena salud cardiovascular lo que también redunda en nuestra salud cerebral, ya que si todos los órganos obtienen un correcto aporte tanto de sangre como de oxígeno, nuestro cerebro también funcionará mucho mejor. Las nueces, por ejemplo, consumidas de forma habitual, mejoran la memoria de trabajo, es decir, la que permite el almacenamiento a corto plazo de la información.

Espinacas
Las espinacas, gracias la presencia de minerales, vitaminas, pigmentos y fitonutrientes, incluyendo potasio, manganeso, zinc, magnesio, hierro y calcio que esta contiene que contienen, ayudan (sobre todo el potasio) a mantener la conductividad eléctrica del cerebro, así las señales entre las neuronas se producen de forma más rápida y por tanto, nos hacen pensar de forma más clara y responder así más velozmente.

Calabaza
La calabaza es el alimento antioxidante por excelencia. Su contenido en ácido fólico puede ayudarnos a mantener nuestra mente despierta y ágil, mejorar nuestra memoria y también la velocidad a la que el cerebro procesa la información. De hecho, múltiples estudios han sugerido que una falta de ácido fólico puede generar trastornos mentales como la depresión.

Brócoli
Un estudio con ratones de laboratorio y publicado en la revista Neuroscience Letters reveló que éstas mejoraron su desempeño cognitivo tras administrarles un compuesto con brocoli. Así, este superalimento puede proteger el cerebro tras una lesión. Sus nutrientes tienen la capacidad de potenciar la memoria además de preservar la buena salud de nuestro órgano pensante.

Aceite de oliva
Este “oro líquido” posee importantes efectos antioxidantes de protección para los tejidos que evitan el daño causado por los radicales libres que pueden dañar el tejido sano, así como disminuir la capacidad de nuestra memoria. Consumir aceite de oliva, gracias a sus grasas saludables, nos llevará a que nuestra circulación sanguínea sea correcta y que todas las células de nuestro organismo funcionen correctamente, incluido nuestro cerebro.
Agua
¡El agua es sanísima! Y para tu cerebro también. Teniendo en cuenta que ésta es responsable de más del 85% del peso del cerebro, no podemos obviar su importancia. Estando adecuadamente hidratado ayudarás en el crecimiento del volumen de tu cerebro. Así que aunque parezca el superalimento más corriente, tiene un papel crucial en la salud cerebral.

El aguacate destaca por su alto contenido en vitamina E, pero son muchos los beneficios que esta fruta ofrece para el organismo humano, concretamente para tu cerebro. Este superalimento posee propiedades antioxidantes que ayudan a prevenir el envejecimiento y el deterioro precoz de nuestra salud cerebral. Por si esto fuera poco, también contienen omega 3, esencial para proteger al cerebro del desgaste prematuro.

Tomate
Comer tomates reduce el riesgo de derrame cerebral. El licopeno contenido en este superalimento ha demostrado ser un aliado estupendo para la prevención de muchas enfermedades como el accidente cerebrovascular o ictus. Todo ello gracias a las propiedades antioxidantes del tomate. El licopeno, está presente tanto en tomate crudo como cocinado, por lo que no hay ningún inconveniente en introducirlo como más nos guste en nuestra dieta.

Cacao
El cacao, siempre consumido con moderación puede aportar un peso positivo a la salud de nuestro cerebro, ya que sus antioxidantes evitan el envejecimiento prematuro del organismo, ya que permite permite mejorar el flujo sanguíneo que llega al cerebro, lo que también favorece el mantenimiento de las habilidades cognitivas.