El fundador y director general de Tesla y SpaceX escribió sus provocadores comentarios contra Bolivia, además opinó en Twitter contra un proyecto de Ley de estímulo del Gobierno estadounidense para ayudar a impulsar la economía
Sin Embargo
El empresario Elon Musk, conocido por sus polémicos mensajes en Twitter, ha causado un nuevo alboroto en la red al sugerir, aparentemente, que podría llevar a cabo golpes de Estado en cualquier lugar en beneficio de su empresa. La declaración, realizada en relación a un comentario de un internauta sobre el golpe de Estado en Bolivia, ha desatado una fuerte polémica en la red social e incluso ha motivado al Presidente boliviano depuesto, Evo Morales, a responderle. Otros opinan, sin embargo, que el multimillonario podría estar bromeando.
“Daremos un golpe a quien nos dé la gana”
El fundador y director general de Tesla y SpaceX escribió sus provocadores comentarios después de opinar en la misma red que otro proyecto de Ley de estímulo del Gobierno para ayudar a impulsar la economía estadounidense “no sería lo mejor para el pueblo”.
En respuesta, uno de los comentaristas escribió: “¿Sabes lo que no fue lo mejor para el pueblo? Que el Gobierno de EU organizara un golpe de Estado contra Evo Morales en Bolivia para que pudieras obtener el litio allí”.
La publicación desencadenó un acalorado debate en Twitter. El periodista Max Blumenthal afirmó que el tuit de Musk “prácticamente se atribuye el mérito golpe de litio boliviano”. En la misma línea, el periodista argentino Carlos Montero calificó la declaración de “muy fuerte”, señalando que “el dueño de Tesla se jacta” del golpe de Estado en la nación andina.
Otros internautas describieron las declaraciones de Musk como “frívolas”, así como “asesinas y crueles”.
Sin embargo, algunos usuarios argumentaron que el empresario estaba claramente bromeando, más allá de que su broma fuera de mal gusto.
“¡Defenderemos siempre nuestros recursos!”
A su vez, Evo Morales enfatizó en su cuenta de Twitter que los comentarios de Musk representan “otra prueba más” de que el golpe de Estado en su país fue por el litio boliviano; “y dos masacres como saldo; ¡Defenderemos siempre nuestros recursos!”, aseveró Morales.
Bolivia posee una reserva de 21 millones de toneladas de litio, lo que sitúa a ese país andino como el mayor poseedor de este mineral en el mundo.
En reiteradas ocasiones, el mandatario depuesto ha calificado los eventos que lo obligaron a abandonar Bolivia como un golpe de Estado destinado a instalar en el país a un líder de derecha que abra las reservas de litio de Bolivia a la explotación por parte de la industria.
En noviembre de 2019, Bolivia anuló un contrato con la empresa alemana ACI Systems Alemania (ACISA) para industrializar el litio. Aunque es cierto que Tesla recibe litio de Australia, algunas informaciones apuntan a que también es uno de los clientes de ACISA.
Los últimos días de Elon Musk
Reivindicar el golpe de estado en Bolivia no fue lo único llamativo que el magnate hizo en los últimos meses. También mostró su excelente relación con Donald Trump en el tema que más conmueve a los norteamericanos, y al mundo, por estos días. Desde la aparición de los primeros casos siempre menospreció la importancia de la pandemia de coronavirus y realizó una importante campaña para reabrir su planta de fabricación de autos en California, uno de los estados que más restricciones impuso en los Estados Unidos.
En ella llegó a amenazar con despidos a los empleados que temían volver a sus lugares de trabajo, y fanfarroneó con ponerse al frente de la resistencia si el gobierno intentaba impedir la reapertura. “Si van a detener a alguien, ahí estaré yo para que me detengan solo a mí”, tuiteó.
En esa batalla tuvo el apoyo público del presidente Trump, que exigió por las redes sociales el levantamiento de las restricciones sanitarias y sugirió que el magnate trasladase su fábrica a Texas, menos dispuesta a tomar medidas contra el coronavirus.
Trump y Musk habían coincidido poco antes en el lanzamiento del cohete Falcon 9, una parte fundamental del plan de conquista espacial privada por parte de la empresa SpaceX, también propiedad de Musk. En esos días Trump no vaciló en comparar al empresario con Thomas Alva Edison y aseguró que Musk es “uno de nuestro genios y tenemos que proteger a nuestros genios”.
No sólo lo dijo, también hizo que el Estado norteamericano aporte lo suyo a la aventura. SpaceX depende completamente del soporte financiero de la NASA y el presidente privatista dotó de 25,000 millones de dólares a la empresa aeroespacial en el último año.
El amor mutuo llegó hasta los más mínimos símbolos. En los últimos tiempos se puso de moda en Estados Unidos decir “Tenés que tomar la pastilla roja”, imagen extraída de la película The Matrix, como una forma de identificarse con el color de la campaña reeleccionista de Trump.
Tuitero compulsivo, Musk lo compartió en sus redes sociales acompañado con una rosa roja. La hija de Trump, Ivanka, fue una de las primeras en sumarse con un sonoro ¡”Tomada!” Pero enseguida recibieron el comentario menos esperado. La co-creadora de la película, Lilly Wachowski, les dedicó un aún más sonoro: “¡Váyanse a la mierda los dos!”